Bendeciré a Jehová en todo tiempo; su alabanza estará de continuo en mi boca
— Salmo 34:1
Meditación
Este versículo no fue escrito desde la tranquilidad de un palacio ni en medio del éxito. David lo escribió tras haber huido por su vida, humillado, fingiendo locura ante un rey enemigo. Y aun así, con el corazón firme, declara:
“Bendeciré a Jehová en todo tiempo.”
Es una declaración radical. No dice “cuando todo va bien”, “cuando siento Su presencia”, o “cuando me responde como espero”. No. Dice en todo tiempo.
Hay momentos en la vida donde alabar a Dios se siente natural: una oración respondida, una sanidad, un nuevo comienzo. Pero hay otros donde la alabanza es un acto de fe, cuando las lágrimas caen y no hay respuestas claras.
David entendía que Dios no cambia, aunque sus circunstancias sí. Por eso su alabanza no dependía del entorno, sino del carácter de Dios.
La alabanza no es un reflejo de lo que sentimos, sino de lo que creemos.
¿Qué significa “bendecir a Jehová”?
- Reconocer Su grandeza.
No con un ritual vacío, sino con un corazón que exalta quién es Él: justo, fiel, soberano, amoroso. - Hablar bien de Él con nuestros labios.
“Su alabanza estará de continuo en mi boca.” ¿Qué hay en nuestra boca en tiempos difíciles? ¿Queja o confianza? - Recordar lo que ha hecho.
La gratitud es combustible para la alabanza. Cuando no sabes qué decir, recuerda lo que Él ya hizo por ti en la cruz.
¿Cómo bendecir a Dios “en todo tiempo”?
- En la prueba:
Cuando todo se tambalea, bendice a Dios por Su fidelidad. Él sigue en control. - En la escasez:
Bendice a Dios por el pan que sí tienes, por Su provisión diaria, por Su cuidado. - En la espera:
Bendice a Dios aunque la respuesta aún no llegue. La espera también forma parte del plan. - En el gozo:
No olvides a Dios cuando todo va bien. Dale gloria, no te acostumbres a la bendición.
Aplicación
- ¿Tu boca ha sido un canal de alabanza o de queja últimamente?
- ¿Tu fe ha aprendido a cantar incluso en la noche?
- La madurez espiritual no se ve en cuánto sabemos, sino en cuán dispuestos estamos a confiar en Dios aún sin entenderlo todo.
- David no tenía todo resuelto cuando escribió este salmo. Pero sí tenía algo claro: no importa el tiempo, Dios sigue siendo digno.
Oración
“Señor, enséñame a bendecirte en todo tiempo. Que mi boca no se llene de queja, sino de alabanza. Cuando no entienda, ayúdame a confiar. Cuando tenga miedo, recuérdame que Tú estás conmigo. Que mi vida sea una canción que te glorifique siempre, en los días soleados y en las noches más oscuras. Amén.”